EQUANUM FUENTES DE AGUA, FUENTES DE VIDA
El cuento del agua, el viento y la verdad.
En un tiempo no muy lejano, oí decir a un viejo sabio que el agua , el viento y la verdad sellaron entre ellos un pacto de hermandad.
Cierto día la verdad y el agua preguntaron al viento:
- Amigo, tú eres muy sutil y vas muy rápidamente a todas las partes del mundo, por lo tanto, nos conviene saber dónde hallarte siempre que te necesitemos.
A lo que el viento susurró: -Me encontraréis en la cañada que está entre las sierras y, si no me encontráis, id prestos a un árbol al que llaman el álamo temblón. Allí ciertamente me encontraréis, pues nunca jamás me voy de allí.
A continuación, la verdad y el viento preguntaron al agua dónde la hallarían cuando la necesitaran.
El agua, inmersa en sabiduría, contestó: -Me encontraréis en las fuentes, y si no es así, buscadme en los juncos verdes, ¡Mirad allí, pues ahí me encontrareis con total seguridad siempre que preciséis de mí!
Ávidos de respuesta, el agua y el viento preguntaron a la verdad, y le dijeron:
Amiga, cuando te necesitemos, ¿dónde te encontraremos?
Y la verdad, pausada, hizo ademán de responder, y lo hizo así:
-Amigos míos, mientras me tengáis entre manos, guardadme bien para que no me escape, pues si de vuestras manos salgo alguna vez, nunca jamás me podreis encontrar, pues soy de tal naturaleza, que aborrezco a quien una vez me abandona, pues pienso que el que una vez me desprecia, no es digno de volver a poseerme.
Hoy os dejamos con esta reflexión. Una sabia enseñanza en torno al agua.
PROTEGE EL AGUA Y APRENDE, DISFRUTA POR Y PARA LA NATURALEZA!